Más allá del control glucémico: Riesgos ocultos de los agonistas GLP-1
Los agonistas del receptor del péptido-1 similar al glucagón (GLP-1RA), como Ozempic (semaglutida) y Mounjaro (tirzepatida), son ampliamente utilizados para el control glucémico en pacientes con diabetes tipo 2 y para la pérdida de peso en pacientes con obesidad. Sin embargo, su uso está asociado con varios riesgos para la salud que deben ser considerados.
- Efectos gastrointestinales: Los efectos adversos más comunes de los GLP-1RA son gastrointestinales, incluyendo náuseas, vómitos y diarrea. Estos síntomas suelen ser transitorios y pueden mitigarse mediante una titulación gradual de la dosis y la educación del paciente para reducir el tamaño de las comidas.[1-4]
- Riesgo de enfermedad de la vesícula biliar: Se ha observado un aumento en el riesgo de colelitiasis y colecistitis en pacientes tratados con GLP-1RA. En los ensayos controlados con placebo, la colelitiasis se reportó en un 1.5% y 0.4% de los pacientes tratados con semaglutida 0.5 mg y 1 mg, respectivamente, en comparación con ningún caso en los pacientes tratados con placebo.[1][3][5]
- Complicaciones de la retinopatía diabética: En el ensayo SUSTAIN-6, se reportaron complicaciones de la retinopatía diabética con semaglutida inyectable. Aunque no está claro si esto es un efecto directo del fármaco o debido a una rápida mejora en el control glucémico, se recomienda que los pacientes se sometan a exámenes oculares adecuados antes de iniciar la terapia.[1][3-4]
- Pancreatitis: Aunque los informes postcomercialización han sugerido posibles asociaciones entre los GLP-1RA y la pancreatitis aguda, los grandes ensayos clínicos no han demostrado un aumento significativo en el riesgo de pancreatitis. Sin embargo, se debe discontinuar el tratamiento si se sospecha pancreatitis.[1][3][5]
- Riesgo de cáncer de tiroides: Los GLP-1RA, incluyendo semaglutida, están contraindicados en pacientes con antecedentes personales o familiares de cáncer medular de tiroides (MTC) o neoplasia endocrina múltiple tipo 2 (MEN2). Aunque los datos actuales no establecen una relación causal clara entre los GLP-1RA y el MTC en humanos, se recomienda precaución y monitoreo adecuado.[2-3][5]
- Reacciones alérgicas: Se han reportado casos de anafilaxia y angioedema con el uso de GLP-1RA. Se debe tener precaución en pacientes con antecedentes de estas reacciones.[4-5]
- Lesión renal aguda: Los efectos gastrointestinales severos pueden llevar a deshidratación y, en consecuencia, a lesión renal aguda. Se recomienda monitorear la función renal al iniciar o escalar las dosis de tirzepatida en pacientes con insuficiencia renal.[4]
- Eventos cardiovasculares: Aunque los GLP-1RA han demostrado beneficios cardiovasculares, se ha observado un aumento modesto en la frecuencia cardíaca. La relevancia clínica de este efecto aún no está clara.[1][3]
En resumen, aunque los GLP-1RA como semaglutida y tirzepatida son efectivos para el control glucémico y la pérdida de peso, su uso debe ser cuidadosamente monitoreado debido a los riesgos potenciales mencionados. La titulación gradual de la dosis y la educación del paciente son esenciales para minimizar los efectos adversos gastrointestinal
Referencias
- 2020 Expert Consensus Decision Pathway on Novel Therapies for Cardiovascular Risk Reduction in Patients With Type 2 Diabetes: A Report of the American College of Cardiology Solution Set Oversight Committee. Das SR, Everett BM, Birtcher KK, et al. Journal of the American College of Cardiology.
- Assessment of Thyroid Carcinogenic Risk and Safety Profile of GLP1-RA Semaglutide (Ozempic) Therapy for Diabetes Mellitus and Obesity: A Systematic Literature Review. Feier CVI, Vonica RC, Faur AM, Streinu DR, Muntean C. International Journal of Molecular
- Safety of Semaglutide. Smits MM, Van Raalte DH. Frontiers in Endocrinology.
- MOUNJARO. Label via DailyMed. Food and Drug Administration
- Ozempic. Label via DailyMed. Food and Drug Administration